Personas buenas, y solas,
por mirarte a los ojos
con terremotos extraviados.
por mirarte a los ojos
con terremotos extraviados.
Gestos y movimientos siguen
un compás que no entiendes
ni puedes prever o prevenir.
Entonces te vas por los cerros
de Úbeda y te inventas cuentos
chinos donde no pueden existir.